El gallo crítico
La Organización Mundial de la Salud (OMS) la define como “el uso deliberado de la fuerza o el poder, ya sea en grado de amenaza o efectivo, contra uno mismo, otra persona o un grupo o comunidad, que cause o tenga muchas probabilidades de causar lesiones, muerte, daños psicológicos, trastornos del desarrollo o privaciones.
En otra definición, es minar la autoestima de una persona a través de críticas constantes, en infravalorar sus capacidades, insultarla o someterla a otros tipos de abuso verbal, en dañar la relación de una pareja con sus hijas, hijos o hijes, o en no permitir a la pareja ver a su familia ni a sus amistades.
La principal causa de la violencia es el estrés por la falta de recursos económicos, el abuso del alcohol y la drogadicción asociados comúnmente por la pobreza, pudieran estar también relacionados con la violencia en la población joven o adulta de México.
Su origen parece guardar relación con el desarrollo de la economía productiva que entraño una transformación radical de las estructuras sociales, la violencia no está inscrita por lo tanto, en los genes del ser humano y su aparición, obedece a causas históricas y sociales.
Los siete tipos de violencia son: las amenazas, la coerción, la manipulación, la violencia de pareja, la violencia sexual, el matrimonio infantil, la mutilación genital femenina y los supuestos “crímenes de honor”.
La forma en cómo evitar la violencia es: aumentar las relaciones sanas, estables y estimulantes entre los niños y sus padres o cuidadores; desarrollar habilidades para la vida en los niños y los adolescentes; reducir la disponibilidad y el consumo nocivo del alcohol; restringir el acceso a las armas del fuego, las armas blancas y los plaguicidas.
La violencia afecta a la vida cotidiana en diversas manifestaciones, destruyen la confianza de una comunidad, impactan negativamente en el bienestar de las personas y permiten el surgimiento de nuevas violencias, una más silenciosas que otras, muchas veces invisibles por largo tiempo, antes que seamos capaces de evidenciar el daño.
La violencia más común es la psicológicas, la que representa mayor prevalencia 51.6% seguida de la sexual 49.7%; física 34.7%, económica patrimonial y discriminación 27.4%, la más grave la FÍSICA.
Los lugares donde se vive la violencia son en las familias, noviazgos, trabajo, escuela, comunidad e incluso la violencia puede darse en las instituciones, la exposición a la violencia suele ser algo traumático y puede evocar respuestas tóxicas al estrés, que causan daños fisiológicos y psicológicos inmediatos y a largo plazo.
Trate de ser muy simple, objetivo en este artículo, considero que aquí estamos como país, como sociedad, como comunidad reprobados y tenemos mucha tarea que hacer empezando con nosotros mismos y en nuestra casa, lo demás es lo menos.
Hasta aquí, el Gallo crítico.