La guardia costera de Estados Unidos investiga las causas de la implosión del sumergible “Titan” en el que murieron sus cinco tripulantes cuando realizaban un viaje al fondo del Atlántico Norte para ver los restos del Titanic.
Trabaja con el FBI en la recuperación de pruebas, incluida una operación de salvamento donde quedaron los restos del submarino.
Dicha investigación podría abrir la puerta a posibles demandas contra la empresa ‘OceanGate Expeditions’.
Aunque las cinco víctimas firmaron contratos de exención en caso de muerte, especialistas consideran que este documento podría ser invalido si se demuestran actos de negligencia.
Y es que desde 2018, se le advirtió a la compañía que la estructura del sumergible no soportaba presiones a más de 2 mil metros de profundidad.