Normalicemos la sexualidad

El gallo crítico.

Ahora que termina este tiempo vacacional y que tuve la oportunidad de estar con varias personas en diferentes convivios, en sobremesas y en cafés, hubo ciertas coincidencias sobre este tema que para muchos podría resultar ser un “tabu”, un tema delicado de abordar o simplemente un tema que puede causar resquemor en algunos.

Mi propuesta es cambiar la óptica, darle la vuelta al espejo, ver siempre el lado positivo y ver lo bueno que pudiera ser de forma individual, desde un ámbito familiar o social y empezar a abordar dicho tema sin tanto revoloteo y sin duda seremos una sociedad mucho más libre.

Todos somos seres humanos, (también somos seres sexuales) la sexualidad es una parte normal, saludable y natural de quienes somos a través de cada etapa de la vida. Nuestra sexualidad no sólo incluye el comportamiento sexual sino también el género, los cuerpos y cómo funcionan, nuestros valores, actitudes, crecimientos y sentimientos de la vida, el amor y la gente en nuestras vidas. Los jóvenes aprenden sobre su sexualidad desde el día que nacen, es importante dejar que los niños se sientan bien acerca de su sexualidad desde el principio.

Así es más fácil que hagan preguntas en el futuro sobre su sexo, los padres o tutores puedan utilizar muchos temas para iniciar conversaciones sobre la sexualidad, las relaciones, la comunicación, el respeto, la imagen corporal, la intimidad y el comportamiento sexual como una manera de compartir los valores y la información basada en los hechos que permitan a los jóvenes a hacerse cargo de sus vidas, tener relaciones amorosas y tomar decisiones más saludables, más seguras y estar mejor informados en relación con la sexualidad.

Quienes somos hombres y mujeres, nuestra sexualidad cambia y crece a lo largo de nuestras vidas, la sexualidad incluye comportamientos sexuales, las relaciones sexuales, la intimidad y la forma en cómo elegimos expresarnos como hombres, mujeres o no binarios, orientación sexual, valores, creencias y actitudes como se relacionan con ser varón o hembra, cambios que pasan a nuestro cuerpo como las etapas de la pubertad, el embarazo, o la menopausia, si y cómo escogemos tener niños, el tipo de amigos que tenemos, cómo nos sentimos con respecto a la manera en que nos vemos, o quienes somos como persona, la forma en que nos tratan los demás.

6 herramientas para hablar con nuestros hijos sobre la sexualidad.

Aunque hablar sobre la sexualidad con nuestros hijos puede resultarnos retador, la evidencia científica ha demostrado que cuando conversamos con ellos de manera clara y sencilla sobre estos temas contribuimos a su sano desarrollo sexual.

Específicamente, al tener este tipo de conversaciones nos convertimos en una fuente fiable de información, promovemos sus habilidades para tomar decisiones informadas y responsables, y los ayudamos a reducir comportamientos de riesgo.

Actualmente, la sociedad y las juventudes crecen de manera inverosímil, son día a día más inteligentes y llenos de energía, de información y de herramientas que en su momento nosotros no contábamos o teníamos, por eso es importante actualizarnos, quitarnos estereotipos de la mente y esas creencias que no dudo que pudieran ser correctas, pero muchas de ellas pudieran ser no actuales.

Sin dudarlo los padres deben estar actualizamos, deben continuamente leer y estar actualizándose minuto a minuto, saber dar la información necesaria únicamente, así mismo que los jóvenes tengan y se den la oportunidad de tener la apertura con sus padres de sostener una comunicación sincera y honesta, si se llegará a lograr esto ambas partes no tengo la menor duda que saldrán ganadoras y los resultados serán magníficos en la formación de los hijos, hijas e hijes sin nunca olvidar que el auto-cuidado en la sexualidad depende de cada uno de nosotros.

Hasta aquí, el Gallo Crítico.

Fuentes: Planned Parenthood Lengue of Massachusetts / UMCE.