Este fin de semana ocurrió una de las más grandes tragedias en Seúl, en Corea del Sur, durante el festejo por Halloween en el barrio de Itaewon, donde miles de jóvenes se congregaron en la zona para divertirse, ocurrió una estampida que hasta el momento ha dejado 154 muertos y 33 personas graves.
Videos en redes sociales mostraban imágenes impactantes de jóvenes dando asistencia a las personas que se encontraban en el suelo para reanimarlas pero ya era muy tarde, ya que testigos aseguraron que era tanta gente en esos estrechos callejones que no se podían mover ni respirar.
A las pocas horas de producirse la tragedia, el presidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, organizó una reunión de emergencia y anunció una investigación sobre la causa del accidente.
Es horrible, esta tragedia nunca debió haber sucedido. (…) Como presidente, mi responsabilidad es la seguridad de la vida de los ciudadanos, por lo que me pesa el corazón y batallo para hacer frente a este duelo”, expresó Suk Yeol al conocer la noticia.
Sin embargo, el Jefe de la Policía de este país reconoció que no hubo un operativo adecuado para contener a tanta gente en ese lugar ya que no se cuenta con un manual de acción ante un evento que no tiene una organización oficial en el que se esperan muchas personas.
El gobierno sur coreano anunció que habrá luto oficial hasta el próximo sábado, además se han instalado distintos altares en homenaje a las víctimas, que en su mayoría eran mujeres y adolescentes.
Por su parte, la embajada de México en Coreo del Sur, informó que afortunadamente no hubo mexicanos fallecidos y solo tres mexicanas se encuentran con heridas graves.