Durante el segundo día del juicio a Genaro García Luna en Nueva York, tocó el turno de la defensa para interrogar al primer testigo Sergio Villarreal Barragán, alias El Grande, toda vez que terminó el turno de la fiscalía. Una de las grandes revelaciones de este martes fue que Arturo Beltrán Leyva secuestró a García Luna, molesto porque Luis Cárdenas Palomino dejó de responderle las llamadas.
Este evento, que no fue informado oficialmente en México, aparece en la serie Narcos.
En otro momento, El Grande reveló que, disfrazado de elemento de la SEIDO, participó en la captura del Rey Zambada.
César de Castro, abogado de García Luna, se confundió en varias ocasiones, mezclando fechas y lugares, pero se concentró en destacar las actividades criminales de El Grande, estableciendo que el testigo participó en balaceras, secuestros y cometió asesinatos tanto para el Cártel de Juárez como para el Cártel de Sinaloa, al que ingresó en 2001.
De Castro también hizo hincapié sobre las armas que Villarreal Barragán poseía y su uso en actos de violencia en México; también preguntó sobre las torturas que él presenció, que según el narco fueron dos.
Defensa de García Luna asegura que no hay pruebas
La estrategia de la defensa, además de establecer que El Grande es un delincuente, es demostrar que la fiscalía no posee pruebas contra García Luna, como documentos, grabaciones o fotografías, y que el caso se basa en rumores y “especulaciones de asesinos, secuestradores y traficantes de droga”, que únicamente buscan vengarse de quien fuera el máximo responsable de combatir el narcotráfico.
el caso se basa en rumores y especulaciones de asesinos, secuestradores y traficantes de droga
Edgar de Castro, abogado de Genaro García Luna
Un momento destacable de la audiencia fue cuando el abogado de García Luna le preguntó a El Grande sobre el día que Arturo Beltrán Leyva asesinó a dos mujeres con las que hablaba, porque se rieron de su esposa.
De acuerdo con El Grande, el líder de los Beltrán Leyva las acribilló frente a él que sólo atinó a levantar el brazo por miedo a resultar herido.
Durante su testimonio, que inició ayer, El Grande acusó García Luna y al gobierno mexicano en general de corrupción y subrayó que durante años, el exsecretario de Seguridad Pública recibió pagos mensuales por parte del Cártel de Sinaloa a cambio de información, ayudarle a luchar contra facciones rivales y nombrar y destituir mandos de seguridad en todo el país.
“En México todo es posible, la corrupción es muy grande”, dijo este martes El Grande a preguntas de la fiscal Erin Reid.
En México todo es posible, la corrupción es muy grande
El Grande