La reapuertura del puerto estadounidense de Baltimore tardará, a pesar de que se ha comenzado a desescombrar la zona donde se derrumbó el puente para en una segunda fase buscar los restos de cuatro obreros latinoamericanos dados por muertos, informaron las autoridades.
Dos grúas llegaron para comenzar la complicada operación de retirar los escombros de acero retorcido del puente Francis Scott Key, que colapsó el martes, bloqueando la entrada al puerto de Baltimore.
Buena parte de la estructura cayó al río Patapsco, cuando ocho obreros latinoamericanos, entre ellos tres mexicanos, trabajaban en la carretera reparando baches.
Los mexicanos afectados por el colapso de un puente en Baltimore son de una misma familia. Así lo reveló, en entrevista con NBC News, la esposa de José Cervantes que fue rescatado y sobrevivió a la tragedia.
Los buzos encontraron los cadáveres de dos trabajadores el miércoles, un mexicano y un guatemalteco, pero se tuvo que aplazar la búsqueda de los cuatro restantes por ser demasiado peligroso, anunciaron las autoridades locales.
Los habitantes de la zona asistieron a una vigilia en un parque cercano y el Ayuntamiento de Baltimore lanzó una recaudación de fondos para apoyar a las familias de las víctimas.