Hoy el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) anunció que en enero del 2023, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) presentó una
variación de 0.68 % con respecto al mes anterior.
Por lo que la inflación general anual se encuentra en 7.91 por ciento, cuando en enero de 2022, la inflación se encontraba en 7.07 por ciento.
El índice de precios subyacente incrementó 0.71 % a tasa mensual y 8.45 % a tasa anual y el índice de precios no subyacente subió 0.57 % a tasa mensual y 6.32 % a tasa anual.
Con estas cifras México está viviendo la peor cuesta de enero desde 2001 cuando el índice de precios fue de 8.11 por ciento anual.
Este 2023 nos sorprendió con más aumentos en loncherías, restaurantes, bebidas gasificadas y cigarros; pero también en alimentos como el huevo, el chile serrano, el jitomate, el plátano, la naranja, entre otros.
De acuerdo al Grupo Consultor de Mercados Agrícolas los primeros días de este año, las familias mexicanas han visto que la canasta básica ha incrementado en un 15.8%.
Por su parte la Agencia Planning Quant, reveló que 7 de cada 10 hogares en México tienen problemas para cubrir los gastos habituales. También, casi la mitad de los encuestados señaló que hubo dificultades para pagar el gas y al menos 2 de cada 5 familias indicaron que tuvieron problemas para pagar la luz.
Este informe también señala que casi un 70% de las familias consideró que la cuesta de enero afecta algo o mucho su economía. En cambio, el 36% respondió que la cuesta de enero les ha costado más este año.
Todo indica que la cuesta de enero se está extendiendo hasta febrero, debido a los constantes aumento en los energéticos, es decir las gasolinas y la luz que cada mes muestran un incremento considerable.
Y a esto hay que sumarle el aumento en servicios de transporte, como el Tren Suburbano o el 7.82% en el costo de las casetas federales.