El papa Francisco, que lleva más de tres semanas hospitalizado por una neumonía, está mejor y sus avances se han “consolidado”, por lo que los médicos informaron que su pronóstico deja de ser reservado y estimaron que tendrá que quedarse “algunos días más” en la clínica Gemelli.
El papa de 88 años “sigue estable” pero “dada la complejidad del cuadro clínico y el importante cuadro infeccioso presentado en el momento del ingreso, será necesario continuar la terapia médica farmacológica en régimen hospitalario durante algunos días más”, agregó el reporte clínico.
Horas antes de anunciarse que el pronóstico dejaba de ser reservado, una fuente vaticana afirmó que era “demasiado pronto para hablar de su regreso a Santa Marta”, la residencia donde vive en la Santa Sede.
El líder espiritual de los católicos del mundo ingresó en el hospital Gemelli de Roma el 14 de febrero donde ha sufrido varias crisis respiratorias, la última hace siete días.
Durante su estancia en el hospital, el papa ha estado trabajando de manera intermitente y siguiendo las noticias siempre que ha sido posible, incluidas las inundaciones que han afectado a su país natal, Argentina, donde más de 16 personas han muerto.
El pontífice pidió consuelo para los deudos y los que sufren en estos momentos de dolor e incertidumbre, en un telegrama enviado al obispo de la ciudad, Carlos Alfonso Azpiroz.
“Apenado al enterarme sobre el desastre natural que está afectando a la región de Bahía Blanca, y que ha ocasionado tantas víctimas y daños materiales, ofrezco fervientes sufragios por el eterno descanso de los fallecidos. Así mismo, quiero hacer sentir mi cercanía espiritual a toda la población”, se lee en el telegrama.
