Este día transcurre en México en medio de una sequía que afecta más del 60 por ciento del territorio nacional y el Sistema Cutzamala que abastece al Valle México está en el peor nivel de su historia.
Según el estudio “Perspectivas del agua en el Valle de México”, elaborado por Agua Capital, Red de Agua UNAM y la Unesco, del total del agua potable que se distribuye para uso doméstico, 40% se pierde por fugas en las tuberías y 10% más no está contabilizada.
Pero eso no es todo, el INEGI informó que el abasto de agua potable paso de 62.4 por ciento de los hogares, en 2019, al 52.3 por ciento en 2023.
Los estados que presentan un nivel excepcional de sequía, es decir, con pérdidas generalizadas de cultivos o pastos, riesgo de incendios y escasez total de agua en embalses, arroyos y pozos son:
Chihuahua, Durango, Hidalgo, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Veracruz y Guanajuato.
Para la ONU, el lema del Día Mundial del Agua 2024 es “Agua para la paz”.
- El agua puede crear paz o desencadenar conflictos. Cuando el agua escasea o está contaminada, o cuando la gente tiene dificultades para acceder a ella, las tensiones pueden aumentar. Cooperando en materia de agua, podemos equilibrar las necesidades relativas al agua de todos y ayudar a estabilizar el mundo.
- La prosperidad y la paz dependen del agua. A medida que los países gestionan el cambio climático, las migraciones masivas y la inestabilidad política, deben situar la cooperación en materia de agua en el centro de sus planes.
- El agua puede sacarnos de una crisis. Podemos fomentar la armonía entre comunidades y países uniéndonos en torno al aprovechamiento justo y sostenible del agua, desde los convenios y convenciones de las Naciones Unidas a nivel internacional hasta las acciones a nivel local.