En Estados Unidos cientos de policías y agentes federales siguen buscando al reservista del ejército Robert Card, de 40 años, quien disparó contra decenas de personas en un bar y en un boliche de Maine, matando a 18 de ellas.
El presidente Joe Biden ordenó colocar a media asta la bandera en la Casa Blanca y lamentó “otro tiroteo masivo trágico y sin sentido” en la localidad de Lewiston donde otras 13 personas resultaron heridas, tres de ellas en estado crítico, en el tiroteo más mortífero este año en el país.
Una vasta área de la ciudad permanece bloqueada mientras se realiza la búsqueda del tirador y las autoridades levantaron barricadas en medio de la orden de cierre de escuelas y negocios, al tiempo recomendaron a los residentes permanecer en sus casas.
La gobernadora de Maine, Janet Mills, dijo que el sospechoso se considera “armado y peligroso, y la policía advierte a la gente de Maine que no deben acercársele en ninguna circunstancia”.