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    La importancia de la reconstrucción del tejido social en espacios públicos

    El gallo crítico.

    Este viernes me invitaron a la inauguración de una galería de arte en la colonia Escandón sin dudarlo al recibir la invitación no dude en confirmar mi presencia, ubicada en la calle de Progreso número 92 y se llama Playa Escandón que por cierto los invito a que la visiten, se tomen una copa y se comen un pedazo de pizza a la leña, pasen un rato diferente y permiten sumergirse en un ambiente totalmente relajado pero más allá de convivencia sin prejuicios.

    Retomando un poco lo de ayer quise escribir este artículo en un tema fundamental que es la reconstrucción del tejido social y los espacios públicos que tenemos en las ciudades donde vivimos, en nuestro querido México.

    Empecemos por definir que es tejido social encontré algunas definiciones que me parecen las más entendibles en relación al objetivo que quiero explicar a través de estas líneas en mi artículo de la semana.

    Tejido social es todo lo que tenemos en común y quienes pertenecemos a una comunidad, es lo que nos une, lo que nos identifica, lo que nos hace ser lo que somos y nos permite sentirnos parte de una misma cultura o tradición ó es la conformación de un grupo de personas que se unen para satisfacer necesidades humanas elementales o superiores como son: alimento, salud, educación, seguridad social, cultura, deporte y todo lo que represente una mejor calidad de vida.

    El objetivo es siempre garantizar la gobernabilidad y el bienestar de los habitantes de una entidad, así también de reflejar el grado de pertenencia, solidaridad y cohesión existentes en un grupo de individuos y la forma de construirlo es a través de un contrato que deje de ser social para ser comunitario, dejar de pensar como sociedad y empezar a pensar como comunidad, como comunes que deciden el rumbo de su propia vida pero viviendo en comunión con el otro.

    Hay dos tipos de tejido social el familiar y el comunitario, ambos siempre buscando el bienestar como personas pero también el bienestar como comunidad y para fortalecer el tejido social podemos y tenemos diferentes formas: dignificación del espacio social – público, consciencia y cuidado del medio ambiente y la promoción en igualdad de género, así como aprender, ensenar a compartir con otros, a ser pacientes, a ser buenos acompañantes, las cuales también son formas de fortalecimiento del tejido social y sin olvidar dolerse un poco del y con el dolor y dejar de integrar a una vida solitaria a una vida de familia y/o vecinal esto podría también ayudar a prevenir afectaciones.

    Los espacios públicos tradicionalmente se entienden como parte del dominio público que mantiene un uso colectivo, por ser accesibles, ser utilizados de múltiples formas, facilitar la intensidad de los contratos sociales y favorecer la creación de identidad social y el sentido de comunidad.

    También son los escenarios de interacción social que congrega funciones materiales y tangibles, en tanto son el soporte físico de las actividades cuyo fin es satisfacer las necesidades urbanas colectivas que trascienden los límites de los intereses individuales para convertirse en un espacio común y colectivo.

    Para el sector público también son relevantes los espacios públicos porque brindan y estimular a pequeña escala una economía local que pueden sin dudarlo generar ingresos para el gobierno local.

    Finamente y recapitulando todo lo antes expresado porque no empezamos a pensar en generar como sociedad, como vecinos, como familia espacios públicos para convivir de forma educada, bajo reglas comunes y generar convivencia entre nosotros y si esto lo hacemos paso a paso de forma directa estamos reconstruyendo el tejido social que como sociedad y como nación hemos estado perdiendo día a día.

    ¿Acaso nos cuesta mucho organizarnos entre vecinos, entre familia para generar estos espacios? No tienen que ser proyectos con un alto costo económico en muchas ocasiones los proyectos simples, cotidianos no cuestan nada y aportan mucho.

    Una vez más esto podría ser importante enseñarles a nuestros hijos y a nuestra niñez que generando esto nos hacemos más conscientes de que somos parte de una sociedad diversa, diferente y que tenemos que aprender a respetarnos.

    Un espacio público es el lugar donde podremos convivir y que podemos ser parte de una comunidad…

    Hasta aquí, el Gallo Crítico.

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