A unas horas de que el Congreso de Perú, discutiera su destitución, el presidente Pedro Castillo, mediante un mensaje a la Nación anunció “la disolución del Congreso de la República”, declarando un Gobierno de excepción, la reestructuración del Poder Judicial y toque de queda a partir de las 10 de la noche de este miércoles 7 de diciembre hasta las 4 de la mañana del jueves 8.
Hace unos minutos se logró captar la detención de Pedro Castillo por la Policía Nacional en Lima, se informa que está en la Séptima Región Policial ya que había tratado de llegar a la Embajada de México para pedir asilo político.
Las reacciones en Perú no han parado y hasta miembros de su propio partido han catalogado esta decisión como “un golpe de Estado”.
La vicepresidenta del país, Dina Boluarte ha manifestado su rechazo a la decisión de Pedro Castillo.
Varios miembros del gabinete de Castillo han ido presentando su renuncia y marcando distancia, casos como el del ministro de Trabajo, Alejandro Salas; el de Educación, Rosendo Serna; y de Asuntos Exteriores, César Landa, quien lo ha acusado de haber “violado” la Constitución cerrando el Congreso.
Fuerzas Armadas también abandonan a Castillo.
Por su parte mediante un comunicado conjunto de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional de Perú, pidieron a la población mantener la calma y confiar en las instituciones del Estado legalmente establecidas.
Las Fuerzas Armadas y Policía Nacional de Perú son respetuosas del orden constitucional establecido; el Artículo 134° de la Constitución Política, establece que el presidente de la República está facultado para disolver el Congreso, si éste ha censurado o negado su confianza a dos Consejos de Ministros.
Cualquier acto contrario al orden constitucional establecido, constituye una infracción a la Constitución y genera el no acatamiento por parte de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional de Perú.
El Congreso no reconoció lo dicho por Pedro Castillo y siguió en su sesión donde lo desconoció como presidente y ordenó su detención.