Autoridades estadounidenses informaron que hubo tres llamadas de asistencia del buque escuela Cuauhtémoc tan solo cuatro minutos después de zarpar el sábado en Nueva York, antes de colisionar con el puente de Brooklyn, pero de momento se niegan a “especular” sobre las causas del accidente.
Michael Graham, miembro de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB), ofreció algunos detalles sobre el incidente antes de que su organismo redacte un informe preliminar, previsto en 30 días.
Explicó que la NTSB formó un grupo multidisciplinar de investigadores que empezó a llegar el domingo por la tarde, con expertos en operaciones náuticas, ingeniería marina y de puentes, y supervivencia-
El investigador jefe, Brian Young, detalló que el buque zarpó a las 20:20 hora local del muelle 17 con la asistencia de un remolcador y su plan “era dirigirse hacia el sur del East River para salir al mar.
Agregó que la velocidad de la corriente del East River hacia el puente de Brooklyn era de tres nudos, pero tras zarpar el navío haciendo marcha atrás, esa velocidad se incrementó a seis nudos.
“A las 20:24 horas, una emisión de radio de alta frecuencia fue emitida requiriendo asistencia de otros remolcadores. A eso le siguieron otras dos llamadas de asistencia. A las 20:24 horas y 45 segundos, el mástil del navío chocó con la parte de abajo del puente de Brooklyn”, relató.

El desarrollo del accidente sigue hasta las 20:27 horas, cuando el buque “paró” junto a un muelle en la base del puente, y tres minutos después ya se habían desplegado agentes de la Policía y los Bomberos, dijo.
Los funcionarios señalaron que la información disponible sobre el remolcador que se ve en las imágenes al lado del barco es que le había estado “asistiendo” en su maniobra de zarpe, y uno de los puntos a investigar es qué hace el remolcador normalmente “una vez que se ha ayudado al barco a abandonar un muelle”.
Para eso entrevistarán al piloto del remolcador, al capitán del barco y a otros efectivos clave, señalaron.
Respecto a las hipótesis iniciales de la causa, que apuntaban a una falla mecánica, afirmaron que se va a analizar “el estado del motor para ver si tuvo algún problema”, pero aún no han podido acceder a él, y dijeron no tener información sobre una posible “pérdida de electricidad”, como sugirió el alcalde, Eric Adams.
La NTSB, aseguró Graham, trabaja con las autoridades mexicanas para “lograr acceso” al barco y de momento ha estado buscando videos de seguridad en establecimientos cercanos al lugar y ha establecido tres áreas de investigación: las operaciones de la tripulación, las condiciones del barco y el entorno marítimo.
El Cuauhtémoc está anclado en el muelle 36 del Bajo Manhattan, se ha determinado que es “seguro estructuralmente” y las autoridades trabajan en su traslado a un depósito de reparación “pronto”, afirmó Graham.
Información: EFE