La llamada “ola morada” inundó las calles de la Ciudad de México para exigir una vida libre de violencia, en rechazo al abuso, al acoso, a los feminicidios, por la igualdad de oportunidades, por no tener miedo de caminar solas, por infancias seguras y por justicia.
El Gobierno capitalino informó que la movilización del 8 de marzo con motivo del Día Internacional de la Mujer tuvo una asistencia de más de 200 mil mujeres, transcurrió de manera pacífica y concluyó con saldo blanco.

Las movilizaciones iniciaron a las 12:00 horas en el Ángel de la Independencia con dirección al Zócalo capitalino, y a las 20:30 horas se dieron por terminadas las actividades en este mismo espacio.
Por instrucciones de la Jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, se realizó un operativo interinstitucional, a fin de salvaguardar la integridad de quienes se movilizaron.

Para ello, se desplegaron 800 mujeres policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana que brindaron acompañamiento a distancia a las manifestantes, quienes portaron su equipo de protección personal: casco, escudo y, algunas de ellas, extintores que utilizaron de manera esporádica.
Cabe señalar que los extintores contienen polvo químico seco que no es tóxico al contacto con la piel, y su llenado fue supervisado por la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, el pasado 5 de marzo.
Al paso de los grupos, el llamado “bloque negro” hizo algunas pintas y quemó papeles y vallas. En el Zócalo, prendieron fuego a un kiosco de información turística, junto a la Catedral Metropolitana.

El Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM) dio atención a 73 personas, 66 civiles y 7 elementos de la SSC, por temas menores y fueron atendidas en el sitio.