Una segunda oleada de explosiones simultáneas en aparatos inalámbricos de comunicación causó este miércoles al menos 20 muertos y 450 heridos en diversos puntos de Líbano, lo que deja un saldo total de 32 fallecidos y más de 3 mil 200 heridos en ambas jornadas ocurridas en tan solo 24 horas.
A primera hora de la tarde de este miércoles se registraron por segundo día consecutivo un gran número de explosiones originadas en dispositivos al sur del país, el oriental Valle de la Bekaa y los suburbios meridionales de Beirut conocidos como el Dahye.
Aunque el número de fallecidos en estas áreas controladas por el grupo chií libanés Hizbulá fue superior al del día anterior, el de heridos queda muy por debajo de los 2 mil 800 registrados por causa de la primera oleada, según el último balance ofrecido por el Ministerio de Sanidad Pública del país.
Tanto las autoridades de Líbano como Hezbolá han denunciado que las explosiones fueron obra de Israel y han asegurado que habrá una respuesta, si bien desde el Gobierno israelí no se han pronunciado aún al respecto.
A pesar de no hablar sobre estos incidentes, el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, ha felicitado al Mossad, el servicio secreto israelí, por sus “grandes logros”.
Mientras tanto, La empresa japonesa Icom afirmó que dejó de producir hace diez años el modelo de walkie-talkies que presuntamente estallaron de forma simultánea en Líbano.
“La IC-V82 es una radio portátil que se produjo y exportó, también a Oriente Medio, desde 2004 a 2014. Dejó de fabricarse hace unos diez años y, desde entonces, no se ha comercializado desde nuestra empresa”, afirmó en un comunicado.