En Brownsville, Texas, varias personas estaban en una parada de autobús, frente a un refugio para personas sin hogar, cuando fueron embestidas por una camioneta.
Al menos ocho murieron y otras 10 resultaron heridas, la mayoría eran migrantes venezolanos.
Varias personas detuvieron al conductor hasta que llegó la policía, recibió atención médica y fue arrestado por un cargo de conducción imprudente.
Martin Sandoval, portavoz de la policía de Brownsville, reveló que el responsable ha sido identificado como un hombre hispano, pero no está cooperando con las autoridades…
Testigos describieron haber visto al conductor ignorar un semáforo en rojo, subirse a la acera y atropellar a un grupo de personas que esperaban en la parada de autobús.
Así fue el momento del atropellamiento.